El sistema privado de pensiones, tal como lo conocemos actualmente, y que se caracteriza por la capitalización individual, en oposición al estatal sistema de reparto, fue ideado en Chile, que lo puso en práctica en 1981. Como producto de su comprobado éxito, hoy está vigente en un número importante de países, no sólo latinoamericanos, sino de varios continentes.
El Perú fue, en 1993, el segundo país del mundo que lo adoptó, y un año después le siguió Colombia. Posteriormente lo hicieron otros países, entre ellos México y Argentina, y hoy son diez los países latinoamericanos que lo mantienen operativo. Lamentablemente, el año pasado, Argentina decidió eliminarlo y retornar al antiguo sistema estatal.
Tal como nos señalan los datos de la Federación Internacional de Administradoras de Fondos de Pensiones, correspondientes al cierre del 2009, el país pionero, Chile, es el que cuenta con el fondo más grande. Éste se aproximaba, en esa fecha, a la impresionante suma de US$ 120 mil millones, equivaliendo al 73% de su producto bruto interno (PBI), que fue de US$ 162 mil millones.
México, pese a haber introducido el sistema dieciséis años después que Chile, ya cuenta con un fondo pensionario muy considerable, que casi llegaba en la fecha en referencia a los US$ 90 mil millones, y que se explica, en gran parte, por un número mucho mayor de afiliados. Sin embargo, el monto aún representa únicamente el 10% del PBI.
Colombia, que adoptó el sistema en 1994, ya manejaba, a fines del año pasado, un fondo de casi US$ 40 mil millones, monto equivalente al 17% de su PBI.
El Perú, por su parte, se aproximaba a los US$ 24 mil millones, monto cercano al 20% del producto bruto interno (recientemente acaba de superar los US$ 25 mil millones). En nuestro país, la gran informalidad, así como el elevado desempleo y subempleo, conspiran contra el número de afiliados, pues el número de éstos no sólo es muy inferior al de países mucho más poblados, como México y Colombia, sino también al de Chile, país con muchos menos pobladores que el nuestro. Ese bajo número de aportantes impide que el monto sea mayor, pese a las muy buenas rentabilidades que se viene logrando, y el acelerado ritmo de crecimiento que éstas implican en el fondo.
Al Perú le siguen otros países con fondos bastante más pequeños, pero en algunos casos considerables como porcentaje del PBI. Es el caso de Bolivia (26%) y El Salvador (24%).
te informo que hay una web que a reproducido este contenido, para que tomes las medidas correspondiente saludos....
ResponderEliminarhttp://www.pysnnoticias.com/2010/05/16/el-peru-en-el-ranking-latinoamericano-fondos-privados-de-pensiones-2009/
Ojo que Bolivia ya anunció la nacionalización de sus AFP.
ResponderEliminarGracias por el dato, amigo. Si bien la web en mención consigna la fuente, no deja de ser molesto que no incluya un link, y que lo venga haciendo con tanta frecuencia. Estaremos al tanto del asunto. Gracias, nuevamente.
ResponderEliminarY datos de Brasil?
ResponderEliminar