jueves, 2 de junio de 2011

Con Nueva Ley, se Acerca Petroquímica del Etano

Nuestro país tiene en preparación dos proyectos para la instalación de plantas petroquímicas, a partir del gas natural de Camisea.
El más adelantado, de Nitratos del Perú, estará en Pisco; el segundo, de CF Industries, en Marcona. Ambos emplearán como insumo el metano, el componente más abundante del gas natural (representa aproximadamente el 95% del mismo), para producir úrea, amoníaco y nitrato de amonio. Como tales, representarán a la que se denomina la primera etapa de la petroquímica.

Petroquímica de Braskem en Brasil. La empresa quiere construir una de etano en el Perú.

Pero también está en evaluación, como parte de la segunda etapa de desarrollo de esta fundamental industria, la construcción de plantas petroquímicas a partir del componente más escaso en el gas natural: el etano, que suele representar en promedio el 5% de este.
Este tipo de proyectos no se limita a la producción de úrea, amoníaco y nitrato de amonio, como los dos primeros. Va mucho más allá, hacia la obtención de insumos químicamente más complejos, como el etileno y el polietileno, de los cuales se puede obtener productos industriales sumamente valiosos en el mundo moderno: plásticos, textiles, detergentes, cosméticos, etc.

Por tal razón, son mucho más costosos que los basados en el metano, no solo por la planta en sí, sino también por la infraestructura complementaria requerida, que incluiría la construcción, en el caso peruano, de una planta separadora del etano cerca de Camisea, y un gasoducto adicional. Además, necesitan un aprovisionamiento mucho mayor de gas natural (para lograr la cantidad necesaria de ese componente escaso). Afortunadamente, al parecer nuestro gas tiene un 10% de etano, porcentaje excepcionalmente alto, que facilitará enormemente las cosas. Hasta ahora, ante la falta de infraestructura que promoviera su utilización, dicho insumo ha estado siendo tratado como un simple subproducto del gas. Pero, como veremos a continuación, ello cambiará muy pronto.

Un extracto de la nueva ley (hacer click para ampliar).

Ocurre que se acaba de promulgar la Ley 29690 (Ley que Promueve el Desarrollo de la Industria Petroquímica Basada en el Etano y el Nodo Energético en el Sur del Perú). El año pasado ya se había promulgado la Ley 29163 (Ley de Promoción para el Desarrollo de la Industria Petroquímica), que sienta las bases para el desarrollo de la industria, pero faltaba una que pusiera énfasis específicamente en el etano, habida cuenta de sus peculiaridades y complejidades. La norma establece que "la industria petroquímica del etano abarca los procesos de separación del etano del gas natural y de transformación necesarios para producir etileno y sus productos derivados -como polietilenos, óxido de etileno, cloruro de polivinilo, etilenglicol, entre otros- y que sean insumos para la elaboración de productos finales, atendiendo prioritariamente el mercado interno". Además, declara de necesidad e interés público este tipo de proyectos y obliga a los productores a proveer de gas a los interesados en llevarlos a cabo.

Ya hay, desde hace varios años, un par de proyectos en estudio. Uno es el de las empresas brasileñas Braskem y Petrobras y la peruana Petroperú (que demandaría una inversión de US$ 2 mil millones); y otro el de la coreana SK Energy (que costaría unos US$ 4 mil millones).

El año 2009, el primero de ellos efectuó su estudio de prefactibilidad, y a la fecha se halla a la espera de la confirmación de más reservas de gas en el Lote 58, operado por Petrobras, para poder iniciar el estudio de factibilidad. Lo más probable es que esta planta se construya en Ilo, ciudad en la cual desembocará el gran Gasoducto Andino del Sur.

Si bien el Consorcio Camisea ha dejado ver que le preocupan varios aspectos (la disponibilidad de gas, la construcción de la planta de separación, la construcción del gasoducto para el etano y la disminución del poder calorífico de su gas), ninguno de ellos parece ser de difícil solución.
El primero, referido a la gran oferta requerida para el desarrollo de esta industria, podrá resolverse sin mayor dificultad, con el aporte de los varios lotes que ya se hallan en producción (88 y 56), y con el de los que lo harán a mediano plazo (57 y 58).
El segundo, que tiene que ver con el alto costo de la planta que separará el etano del metano, se podrá resolver con una adecuada negociación de todas las partes interesadas. Aquí se está propiciando una multimillonaria posibilidad de negocio a partir de un insumo valiosísimo, que hasta ahora se subutilizaba. Por lo tanto, no cabe duda de que la planta generará una excelente rentabilidad a quien la construya.
En cuanto al tercer aspecto, sería resuelto mediante el gasoducto andino del sur, que contaría con tres tuberías, una de las cuales transportaría el etano (las otras dos serían para el gas natural y los líquidos de gas).
Y en lo que atañe a la eventual reducción del poder calorífico del gas, tampoco existe problema, pues la nueva ley establece que la extracción del etano se hará solo hasta un nivel tal que no implique la reducción de dicho poder.

Con un proyecto de este tipo, el Perú multiplicará el valor de su gas natural, pues, como tal, este tiene un valor de apenas US$ 200 por tonelada, que se eleva a US$ 300 al ser convertido en etano, a US$ 700 al convertirse en etileno, a US$ 1,300 al transformarse en polietileno, y a entre US$ 2 mil y US$ 3 mil al convertirse en plásticos. Es decir, con la nueva industria, se obtendrá un valor entre diez y quince veces mayor al actual.

Además, esta considerable ganancia de valor ocurrirá sin afectar en absoluto la oferta actual (destinada a la producción de electricidad, a la industria, al abastecimiento residencial y vehicular y a la exportación), pues empleará únicamente el insumo que se subutilizaba. El "residuo" actual, el etano, pasará a ser la parte más valiosa de nuestro gas. Con ello, aparte de dar un salto cualitativo en materia de tecnología, el Perú optimizará el consumo de este vital recurso, incrementando notablemente el valor de su producción y su capacidad generadora de ingresos.

2 comentarios:

  1. Que genial. Este un gran paso para el establecimiento en el Perú de industrias más complejas. Todo es consecuencia de las acertadas políticas económicas y de aliento a la inversión de los últimos años.

    Es terrible escuchar a un candidato presidencial instigar al odio a las empresas en sus mitines de campaña. No podemos permitir que tantos años de esfuerzo se vayan por la borda.

    ResponderEliminar
  2. ESTA OBRA e industria, seria muy beneficioso para nosotros los peruanos, mañana en las elecciones esperemos q gane el mejor, para continuar con estas grandes obras

    ResponderEliminar