Hoy, en nuestra sección dedicada a conocer los datos más recientes de las siete principales economías latinoamericanas, tenemos el referido al crecimiento del producto bruto interno de junio y el acumulado desde enero hasta dicho mes.
Si bien aún no se tiene el de Colombia, estimamos que (pese a la notoria desaceleración de su economía, afectada por los bajos precios del petróleo, su principal exportación) sigue encabezando la lista, pues su dato acumulado a mayo se situaba en 2.9%, bastante por encima de aquéllos de los demás países.
Pero hay cambios en el segundo lugar, en el cual el Perú ya alcanzó a México, figurando ahora ambos países con una tasa de 2.4%. El nuestro, como se recuerda, tuvo una significativa recuperación en junio, creciendo 3.87%. México, por su parte, logra ese acumulado merced a una expansión de 2.6% en el primer trimestre y una tasa más baja, de 2.2%, en el segundo (aunque con una cierta recuperación en junio, mes en el que ha registrado un avance de 3.1%).
Chile, que venía desacelerándose (contabilizando en mayo su tasa más baja, de 1.1%), se recuperó en junio, creciendo 2.6%, y alcanzando así un guarismo acumulado de 2.2%, que lo consolida en el cuarto lugar.
Argentina, situada en la quinta posición, tuvo en junio una tasa de expansión de 3.8% que revela que, contrariamente a lo observado en la mayoría de los restantes países, viene acelerando su actividad económica. Con ello acumula un dato de 1.8% en el semestre.
En los dos últimos la situación es mucho más complicada. Brasil, al igual que en todos los meses de este año, volvió a caer según el IBC-BR, aunque ya no a una tasa tan fuerte como la de mayo (-4.7%). El ultimo dato del IBGE señala que en el segundo trimestre decreció 2.6%, bastante más que en el primero (-1.6%). Con ello, acumula una marcha atrás de 2.1% en el semestre.
De Venezuela no hay mucho que decir. La mejor prueba de su pésima situación económica es la increíble decisión de su gobierno de ocultar cifras. Según la CEPAL, la actividad productiva, que retrocedió 4% el año pasado, lo haría a una tasa aún mayor, de 5.5%, en el actual.
Nota: el cuadro y texto de este artículo fueron modificados el día 21 de agosto, para considerar el dato argentino, recién publicado por el Indec. También el día 28, para incluir la nueva información de Brasil, publicada ese día por el IBGE.
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