La referencia hecha por un comunicado oficial acerca de que el nuevo buque oceanográfico peruano Carrasco es uno de los mejores del mundo en su categoría no es exagerada.
Y es que nuestra más flamante embarcación, que además tiene capacidad de navegar por las zonas polares, con hielos de hasta un metro de espesor, es prácticamente una réplica del buque inglés RRS "Discovery IV", construido por el mismo astillero Freyre, por encargo del Natural Environment Research Council (Consejo de Investigación del Medio Natural) de Inglaterra.
El referido buque, considerado el más avanzado en su tipo, y seguidor de la tradición marinera y polar de sus homónimos antecesores, fue bautizado y puesto en servicio en octubre del 2013, en una ceremonia a la que asistió la princesa Ana.
Entre los escasos detalles que diferencian a ambos buques en el aspecto estructural se puede mencionar que el nuestro tiene cinco metros menos de eslora (largo), y posee un helipuerto (cosa de la que carece el buque británico).
Lógicamente, es muy probable que en el aspecto del equipamiento existan muchas más diferencias, teniendo en cuenta que Inglaterra es una de las mayores potencias científicas del planeta.
Pero no deja de ser muy grato y satisfactorio saber que, por lo menos en lo que respecta a diseño, estructura y otras características muy importantes, hoy ya tenemos en el agua, y muy pronto plenamente operativo, un buque oceanográfico a la altura de los mejores del mundo.
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