Aunque no exenta de problemas, continúa la reforma del transporte urbano en Lima, a través de los denominados corredores viales.
Hoy hubo una importante prueba de ello en el que discurre en la ruta Javier Prado-La Marina-Faucett, el segundo puesto en marcha en la capital, luego del pionero corredor Tacna-Garcilaso-Arequipa.
Es que se puso en circulación cincuenta nuevos vehículos, que se añadirán a los que venían prestando servicio, que de esta manera ya superan los 210. Los flamantes buses, de 12 metros de largo y 38 asientos, son de la marca Volkswagen, y fueron ensamblados en el país por la empresa nacional Motores Diesel Andinos (MODASA). Pertenecen al Consorcio Empresarial Javier Prado Express (Cejaprex), que espera incorporar veinte más a fines de agosto, acercándose con ello a la cifra de 256 establecida en el contrato de concesión.
Esta buena noticia se produce pocos días después de que la municipalidad anunciara la apertura del tercer corredor, que desde fines de junio operará en fase de prueba en la ruta San Juan de Lurigancho-Abancay-Brasil, con la meta de iniciar operaciones en los primeros meses del próximo año.
De esta manera, el sistema de corredores de Lima, que ha afrontado diversos contratiempos a lo largo de su corta existencia (como el que originó una severa observación del Ministerio de Economía que derivó en la descalificación, hace algunos meses, de uno de los consorcios), sigue expandiéndose y afirmando su presencia, situación que sin duda es bienvenida por los cientos de miles de personas que cada día emplean sus servicios.
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