Es muy positivo el viaje que el presidente Pedro Pablo Kuczynski (PPK) acaba de emprender rumbo a China.
Es que el gigante oriental no sólo es el país más poblado y la segunda economía mundial, sino también el principal comprador de nuestros commodities (cobre, hierro, plata, plomo, zinc, gas natural y harina de pescado). Además, desde la puesta en vigencia del tratado de libre comercio el año 2010, se viene convirtiendo en un importantísimo demandante de varios productos no tradicionales, entre los que sobresalen la uva, los moluscos, las algas, los calamares, las tablillas y frisos para parqués, la lana de alpaca, la tara, etc. Y hay un numeroso contingente de nuevos productos que se podrían sumar.
Por si fuera poco, y como consecuencia de su gran crecimiento y expansión, las empresas chinas y sus inversionistas privados se están desplegando por el mundo, incursionando en negocios de todo tipo.
En el Perú ya están presentes en varios importantes negocios, como la mina de hierro de Marcona (operada por Shougang) y las cupríferas Toromocho (operada por Chinalco) y Las Bambas (operada por MMG).
Pero PPK desea que esa presencia se acentúe, para que contribuya mucho más intensamente con nuestro crecimiento. Por eso ha viajado con una larga lista de proyectos de inversión que podrían captar su interés. Entre ellos resaltan varios referidos a la construcción de infraestructura (como un tren de cercanías para conectar Lima con las ciudades aledañas y la inversión en varios puertos), la refinación de nuestro cobre (para reducir nuestra dependencia de los concentrados y producir más cátodos), etc. Además, buscará promover el turismo, que se podría beneficiar enormemente si tan sólo un pequeño porcentaje de los 1,360 millones de chinos se animara a visitar el Perú.
Nosotros concordamos con esa idea y esos objetivos. Eso sí, esperamos que la invitación a los inversionistas de ese país se dé en el marco de iniciativas que no impliquen ataduras, privilegios, ni dependencias, ni tener detrás de ellos a su muy activo y protagónico gobierno ejerciendo presión con el fin de lograr ventajas excesivas.
El Perú, como país saneado, abierto a la inversión y cada vez más atractivo para ésta, puede y debe lograr su objetivo de ser cada vez más competitivo y de seguir creciendo sostenidamente mediante una elevada apertura, que no sólo atraiga a los chinos, sino a los mejores inversionistas de cualquier parte del planeta.
Totalmente de acuerdo ... El tren más ventajoso para los involucrados es el transcontinental Brasil Perú, proyecto binacional que China desea financiar. Todos ganamos ... Perú y Brasil se integran Nacional y binacional mente, y China ahorra flete y asegura su abastecimiento de alimentos ... Que Dios ilumine a nuestro presidente...
ResponderEliminarQue Dios ilumine a nuestro presidente...x2
EliminarEl siglo 21 es del Asia, mientras mas rapido nos engranamos al comercio Asiatico mejor sera para nosotros.
ResponderEliminarHay una ventaja inmensa, los Asiaticos nos ven de igual a igual, no es el caso con Europa o USA, Asia no nos va a imponer condiciones politica, sociales y menos religiosas para poder acceder a comerciar con ellos. Los Asiaticos no son intervencionistas.
Los Asiaticos con China a la cabeza le roban tecnologia a Occidente, y la ponen a dispocision al resto del mundo a muchisimo menos precio, y hasta con transferencia de tecnologia, y eso pero ni dudarlo hay que exprimirlo al maximo, Europa y USA han tenido el siglo 20 para ellos y no compartieron tecnologia, fue un siglo de prestamos y endeudamientos innecesarios...
Teach how to fish... Eso crea a un ser humano libre, tu decides que haces con esa libertad.