Con el arribo de la gran mayoría de presidentes de nuestro continente, hoy se inició la Octava Cumbre de las Américas en nuestro país.
En ella, lamentablemente, no estarán los de Estados Unidos ni Ecuador, quienes tuvieron que atender asuntos urgentes en sus países.
Pero ello no le quita trascendencia a la reunión, pues, además de los vicepresidentes de los países mencionados, estarán presentes los jefes de gobierno de otros tan importantes como Canadá, Brasil, México y Argentina, así como otros que destacan por sus buenas políticas económicas, entre ellos Chile, Colombia y también el Perú, y otros que lo hacen por su gran dinamismo, como Panamá y República Dominicana.
Afortunadamente, y reflejando el avance que ha tenido el continente en materia de gobernabilidad, la gran mayoría de ellos son de origen democrático. El dictatorial presidente de Cuba no estará presente.
Ojalá la magna cita sea útil para fortalecer a todo nivel las relaciones entre los países del continente, pero sobre todo para encontrar una urgente solución a la terrible crisis que padece el pueblo de Venezuela, abrumado por un gobierno dictatorial que con sus pésimas políticas ha conducido al país al más absoluto descalabro económico.
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