Faltando apenas dos semanas y media para el inicio de los Juegos Panamericanos y Parapanamericanos Lima 2019, nuestro país ya está sintiendo la emoción de albergar un evento de ese nivel.
Así se está poniendo de manifiesto con las emotivas imágenes en las que se aprecia cómo la antorcha panamericana, luego de haber arribado desde la histórica y mexicana Teotihuacán a nuestra imperial ciudad del Cusco, se está paseando por los más emblemáticos lugares del territorio nacional, encendiendo el entusiasmo de nuestra población.
Todo hace prever que nuestro país será un excelente anfitrión. Ya dio el primer paso en tal sentido con la construcción o adecuación de una infraestructura de primer nivel, lo está continuando con el esfuerzo organizativo de una plana dirigencial muy eficiente secundada por un masivo ejército de entusiastas voluntarios, y ahora busca consolidar todo eso apelando a la calidez y alegría que nuestra población siempre demuestra ante acontecimientos tan notables como este.
Ese notable acontecimiento deportivo tendrá su punto de inicio el día 26 de este mes, cuando la antorcha que hoy recorre todo el país instale su fuego en el pebetero del Estadio Nacional.
LaRaza, de Alaska a Patagonia, milenaria y retomando su lugar de siempre.
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