Peso Argentino y Sol Peruano en el Siglo XXI

Hoy, un reconocido economista liberal de Argentina publicó en Twitter este comentario para referirse a la muy preocupante evolución del tipo de cambio en ese país en lo que va del presente siglo.

Allí señala que mientras en noviembre del año 2001 un dólar de EEUU equivalía a un peso argentino, hoy equivale a nada menos que 100. Eso significa que la moneda del país austral se debilitó a tal punto que perdió el 99% de su poder adquisitivo frente a la del país del norte.

¿Culpa del sistema económico internacional, que "privilegia a los países desarrollados y perjudica a aquellos en vías de desarrollo"? En absoluto. Exclusiva culpa de erróneas políticas económicas, que en el afán de darle un excesivo protagonismo al Estado (subsidiando demagógicamente, controlando precios, prestando a tasas insostenibles, dando empleo a quien no lo merece, financiando con ventajas tributarias y financieras a sectores de dudosa rentabilidad, etc) propician que este gaste irresponsablemente. Y eso, tarde o temprano se traduce en déficit fiscal, emisión descontrolada (o gran deuda), inflación y devaluación de la moneda.

Salvo períodos muy cortos (como el de los años 90), Argentina viene aplicando desde hace setenta años políticas de ese tipo, pues inclusive sus gobernantes que prometieron cambiar el rumbo (Menem y Macri) terminaron haciendo cosas en el mismo estilo. Por eso el país se halla en un indetenible proceso de declive, que, como lo demuestra el dato inicial, ha continuado en el presente siglo. Y la pandemia podría ser un terrible tiro de gracia sobre todo eso.

En contraste, el Perú viene aplicando desde los años 90 una política muy distinta a la argentina. Una que más bien le dio protagonismo al sector privado, en el marco de una economía libre y abierta al mundo. Y eso, al generarle una situación fiscal muy sana, se tradujo en una bajísima inflación y en una gran fortaleza de su moneda.

La prueba de ello es que mientras en noviembre del año 2001 un dólar de EEUU equivalía a 3.44 soles, hoy equivale a 3.38. Al declararse la pandemia en marzo, el valor del billete verde subió hasta casi 3.60, pero luego retrocedió y se estabilizó.

Es decir, en esos casi veinte años nuestra moneda no solo no se ha devaluado nada frente a la norteamericana, sino más bien se ha fortalecido levemente. En el largo plazo se ha mantenido tan sólida como esta.