Minería e Hidrocarburos, por ejemplo, se desplomó 42.29% frente a similar mes del 2019 (47.26% el subsector minería y 13.40% el de hidrocarburos). La Pesca disminuyó 57.82%, y eso sin duda arrastrará fortísimamente a la Manufactura, el sector más importante en la generación del PBI.
El subsector Electricidad, el de mayor peso del sector Electricidad y Agua, retrocedió 30.02%, por la mucho menor demanda de sus principales clientes: la industria, la minería y el comercio.
Similar negativa suerte corrió el rubro Consumo Interno de Cemento, el principal del sector Construcción, pues disminuyó su actividad nada menos que -98.59%, indicando una casi total paralización.
Y como complementando esta retahíla de malas noticias, la demanda externa también tuvo un efecto muy nocivo, pues, con una economía internacional gravemente dañada por la pandemia, las exportaciones disminuyeron un contundente 57.35% (60.42% las tradicionales y 49.45% las no tradicionales).
Está claro que abril, por haber sido el período de mayor intensidad de la cuarentena y la parálisis productiva, resultará el peor mes del año en la materia (mayo será un poco menos malo). La confirmación la tendremos el día 15, cuando el INEI publique la data oficial.
Es lo normal cuando cierras todo. La produccion se puso en ayuno total pero eso no significa la destruccion de la capacidad de producir la cual se recuperará. Aprovechemos para quitar grasa: restructurar el mercado de trabajo, reducir la influencia del estado en las decisiones de los privados, enfocar al estado en sus funciones fundamentales como salud, educacion, seguridad que es para lo que cobran los impuestos. CRISIS significa OPORTUNIDAD
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