Siete Mayores Economías de América Latina: Crecimiento Económico (a Abril del 2020)

La pandemia del COVID-19 ya provocó la caída productiva de las siete mayores economías de América Latina. Así lo demuestran sus respectivos indicadores referenciales acumulados a abril del presente año, todos negativos.

La de Ecuador figura como la de menor retroceso, pero eso es simplemente porque aún no presenta dato de abril, mes en el cual seguramente se acentuará lo observado en marzo, en que la caída de casi 10% ya dejaba ver que las cosas se le ponían difíciles.

Chile también sufrió las consecuencias de la enfermedad, con un muy fuerte retroceso mensual en abril, que ya generó una cifra acumulada sumamente negativa. Ello ha ocurrido pese a haber sido uno de los países que menos restringieron sus actividades en dicho mes, lo que hace prever un mayo mucho más problemático. Lo propio se puede decir de Brasil, que igualmente ha sufrido una gran caída en abril, que sin embargo podría ser superada por la de mayo.

Colombia, no obstante su rígida cuarentena y su relativo éxito en controlar al virus, también tuvo un gran desplome productivo en abril, con lo que ahora su retroceso acumulado se ha hecho muy significativo. Algo parecido ha ocurrido en México, con un tremendo retroceso en abril.

Argentina también aplicó una estricta cuarentena, y esta le sirvió para minimizar los contagios. Sin embargo le está llevando a desplomar su actividad productiva, como se acaba de comprobar en abril. Además, se debe tener en cuenta que el país padece paralelamente una grave crisis económica, que se arrastra desde los gobiernos anteriores y se está profundizando con las cuestionables actitudes del actual, por ejemplo frente a los acreedores externos y a los inversionistas privados.

El Perú, con su terrible caída productiva de abril, figura último en esta tabla. Pero es conocido que ese mes fue el de la más rígida cuarentena y de la mayor parálisis productiva dispuestas para intentar frenar a la pandemia. Los meses siguientes sin duda seguirán mostrando caídas, pero estas serán cada vez menores, de tal manera que hacia final del año ya deberán haber cifras acercándose al cero, preludiando la esperada recuperación, de la mano de los sólidos fundamentos de nuestro modelo, que siguen intactos, y siempre que se evite a toda costa una recaída en materia sanitaria.

Nota: esta es una actualización del artículo publicado el 16 de junio, para incluir los datos mexicano y argentino.