Mientras en febrero la casi totalidad de las siete más grandes economías latinoamericanas registraron caídas productivas frente a similar mes del año pasado, en marzo la situación ha variado sustantivamente, pues ahora priman los crecimientos.
Y son elevados, pues comparan una situación de paulatina normalización de actividades con otra en la que, debido al arribo de la pandemia, se acababa de establecer (con distintos grados de severidad) medidas de restricción.
Así lo demuestran los datos referenciales emitidos por los respectivos institutos de estadística o bancos centrales.
El Perú, el país que más cayó el año pasado, está siendo, gracias a sus sólidos fundamentos económicos, el de mayor rebote. En marzo ha crecido 18.21%, con lo cual acumula una expansión de 3.80% en el primer trimestre, y después de un buen número de meses vuelve a ser el más dinámico del grupo. Otros países con notoria alza fueron Argentina, Colombia y Ecuador, en tanto que Brasil y Chile lo hicieron a tasas más moderadas, pero también importantes. México avanzó modestamente.
Nota: el cuadro y el texto de este artículo fueron modificados el 26 de mayo, para incluir el recién publicado dato mexicano.
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