Al cumplir sus primeros seis meses de gestión, el presidente Humala emitió una nueva positiva señal, al participar activa y entusiastamente, con la comitiva peruana, en la sesión anual del Foro Económico Mundial, en Davos, Suiza.
Allí, alternando con numerosos presidentes, ministros de economía, empresarios de todo el mundo, y funcionarios de los más importantes organismos, dio una nueva muestra de su saludable cambio en materia económica, resaltando las virtudes del modelo peruano, e invitando a los inversionistas de todo el planeta a apostar por nuestro país como destino serio y confiable para sus capitales.Ello ocurrió, como acabamos de señalar, al cumplirse los primeros seis meses (el primer 10%) de su gestión. Afortunadamente, esta ha constituido una grata sorpresa para quienes creemos fervientemente en el libre mercado y vimos con gran desazón su ascenso al poder, ante el temor de que desmantelara el exitoso modelo vigente en las dos últimas décadas y reinstaurara uno como el que padeció nuestro país desde fines de los años 60 hasta 1990.
Felizmente, eso no ocurrió, y más bien cada día parece acrecentarse la convicción presidencial acerca de que el camino seguido por el Perú desde hace ya casi 22 años es el adecuado. Eso, y las buenas señales que se sigue emitiendo, como la del respaldo a la vital inversión minera, la serena negociación en los temas del mayor aporte minero y del gas de exportación, la firma de nuevos TLC, la continuación del proceso de concesiones, la participación en la cumbre de la APEC, y, ahora, la entusiasta asistencia a Davos, contribuirán a despejar los últimos temores, y a terminar de convencer a los inversionistas de que el Perú, luego de un momento de dudas e incertidumbre, ha decidido seguir siendo el país de las ideas claras, de la elogiosa política económica, y del gran crecimiento, donde, por ende, vale la pena invertir.
Y eso, ciertamente, será muy bueno para los sectores más desposeídos, no solo por las crecientes oportunidades de empleo que una economía de elevado dinamismo genera, sino por la mayor disponibilidad de recursos que una situación de ese tipo brinda al Estado para sus políticas de inclusión social y lucha contra la pobreza.
Foto: Presidencia
Esa foto es una representacion clara del nacionalismo, el pragmatismo para regresar a nuestro sitial de pais piloto Sudamericano.
ResponderEliminarMas de izquierda que la cabeza de la diplomacia Peruana no hay(hablando del contexto intelectual) y mas de derecha que la cabeza del MEF tampoco hay.
EL nacionalismo no es ni de derecha ni de izquierda, es simplemente Peruano neto(100%), y tenemos que usar todas las herramientas disponibles para volver a nuestro lugar historico en Sudamerica, llegar al punto de ser la 2da economia en la region, despues de Brasil, y consolidar nuestro poderio cultural milenario en todo el continente.
El Peru ya no puede caer bajo el dominio Europeo hasta el siglo 20, ni del Asiatico en este siglo 21, somos una nacion solida abierta al comercio, no le tenemos miedo a nadie, comerciamos con todos, el como los demas manejen sus paises es problema de ellos, a nosotros nos interesa el Peru, el Peru y el Peru.
Las izquierdas ni las derechas son parte cultural del Peru milenario, nosotros somos una cultura abierta al comercio y basada en la comunidad y familia, somos unicos, lo hemos sido desde siempre y lo seremos en el futuro.
Saludos y adelante con las inversiones, todas son bienvenidas lleguen de la cuna capitalista de la OTAN o de los comunistas Vietnam, China o la teocracia de Iran, venga de donde venga se recibe, el dinero crea chamba y mientras respeten nuestras reglas son bienvenidos todos.
Luis Pardo