Este, titulado "Un Largo Fin de Semana en ... Lima", describe diversos aspectos, paisajes, ámbitos y circunstancias de nuestra ciudad (su clima, su arquitectura, sus iglesias, sus museos, sus barrios y su gente), pero le pone especial énfasis al tema por el cual el Perú está cosechando reconocimiento internacional: su gastronomía.
Sobre ella, menciona que ha convertido a nuestra ciudad en "hogar de la escena culinaria más eléctrica de América. Ha habido una extraña confluencia de eventos que la han colocado en el escenario mundial: la estabilidad política lograda luego de la tenebrosa época del terrorismo y la catástrofe económica de los años 80, el florecimiento de una clase media con una juventud rebelde que dio la espalda a la tradicional admiración por la cocina francesa y lanzó una mirada desprejuiciada a la cocina local, las muchas influencias (primero la española, la africana, la china, y por último la japonesa) y los impecables ingredientes. Estos últimos están disponibles gracias a que el Perú tiene 30 de los 32 tipos de clima del mundo, desde el profundo océano hasta los altos Andes y desde la jungla hasta el desierto."
Haciendo mención de varios de los más famosos restaurantes limeños, pero también de lugares populares muy reputados en la materia, la nota se refiere a la gran diversidad de platos exquisitos que se puede encontrar en ellos, y pone como gran ejemplo al cebiche. Y como para resumir lo observado y degustado, señala: "Con fantástico pescado y tres mil variedades de papa, y ahora con un viaje directo desde Londres con British Airways, nunca ha habido un mejor momento para encarar la escena de la comida."
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