Importante Carretera entre Arequipa y Moquegua

Las sureñas ciudades de Arequipa y Moquegua, capitales de los departamentos homónimos, están interconectadas desde hace muchas décadas por la Carretera Panamericana.

Esta sale de la primera de ellas, desciende hasta las proximidades de la costa, avanza hacia el sur y luego vuelve a ascender, llegando a la segunda. Es una carretera asfaltada, en muy buenas condiciones, que en su discurrir atraviesa las pampas de La Joya y pasa (a través del puente El Fiscal) sobre el río Tambo.

Lamentablemente, dicha vía no atiende a la mayoría de poblaciones situadas entre ambas ciudades.

Pero ahora se va a remediar ese problema, enfocándose en la carretera que partiendo desde Arequipa avanza hacia el sureste, llega a Omate y continúa hasta el punto de empalme con la carretera asfaltada Ilo-Moquegua-Desaguadero (situado 40 kilómetros al noreste de la ciudad de Moquegua). Dicha ruta pasa por las localidades de Polobaya Grande, Puquina, Torata y un buen número de otras más pequeñas.

De ese recorrido de 220 kilómetros sólo están asfaltados unos 50: el tramo de diez kilómetros entre Arequipa y Mollebaya, uno de menos de diez cerca de Puquina y uno de 35 entre el desvío San Juan San June y las cercanías del empalme mencionado en el párrafo anterior.


Felizmente, hoy comenzaron los trabajos en un tramo de lo que queda por asfaltar: el de 118.5 kilómetros que parte desde San Juan San June (en el kilómetro 35)  y llega hasta Puquina, en el kilómetro 153.5.

La vía será de dos carriles y seis metros de ancho (con bermas de 50 centímetros a cada lado). Implicará una inversión de 410 millones de soles (unos US$ 126 millones) e incluirá la construcción de siete puentes y 30 pontones, así como muros de contención, alcantarillas y cunetas.

Gracias a ella, la red de carreteras sumará en esa zona una alternativa a la Panamericana Sur. Además, las dos capitales departamentales mencionadas mejorarán notablemente sus posibilidades de interconexión vial, pues el tiempo de viaje de una a otra se reducirá desde las tediosas seis horas actuales a sólo tres.