En efecto, mientras el tipo de cambio del 9 de noviembre había sido de 3.590 soles por dólar, el día 10, uno después de la reprochable decisión, se comenzó a disparar, de tal manera que el 16 llegó a estar en 3.662 soles. Eso significó una considerable depreciación de 2% en solo cinco días, que obviamente generó un gran nerviosismo en el mercado y pudo haberse agravado y haber comenzado a afectar otras variables, como los precios de las importaciones y las deudas pactadas en dólares.
Felizmente, gracias a la reacción popular el despropósito quedó abortado, y el día 16 se logró la renuncia del gobierno ilegítimo y la elección de un nuevo presidente del país. Eso tuvo un efecto inmediato sobre el indicador, que un día después disminuyó a 3.632 soles y hoy, continuando con esa favorable tendencia, cerró en 3.582, nivel ya menor al del día 9. Con ello, nuestro mercado cambiario dio por cerrada esa inquietante pero felizmente muy corta etapa.
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