Allí se explica, por ejemplo, que tendrá la gran ventaja de poseer una buena profundidad natural, y que su área terrestre y su rompeolas se construirán en una zona ganada al mar.
También se menciona que contará con un viaducto o túnel subterráneo de 1.8 kilómetros de largo que permitirá interconectar su área portuaria con la carretera Panamericana Norte, sin afectar la vida de la ciudad.
En su primera fase tendrá cuatro amarraderos, dos multipropósito y dos para contenedores. Además, dispondrá de 730 mil metros cuadrados de áreas de operaciones de muelle y 270 mil de área auxiliar integral en el complejo de ingreso.
Será un puerto inteligente, equipado con modernas grúas pórtico automatizadas, tanto de muelle (STS) como de patio (RTG).
Cuando en tres años se complete dicha primera fase, que demandará una inversión de US$ 1,000 millones, podrá movilizar un millón de TEU (contenedores de veinte pies de largo) y seis millones de toneladas de carga general y a granel, y recibir buques de 18 mil contenedores.
No cabe duda de que, por sus características, prestaciones y envergadura, está llamado a ser uno de los más importantes del país.
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