La línea en referencia unirá, mediante un túnel subterráneo de 34.8 kilómetros, el norteño distrito de Comas con el sureño de San Juan de Miraflores, en un recorrido de 54 minutos que pasará por el centro de Lima y también por los distritos de Los Olivos, Independencia, San Martín de Porres, Rímac, Jesús María, Lince, San Isidro, Miraflores y Santiago de Surco.
Lo hará mediante 66 trenes automáticos (sin conductor), cada uno de los cuales podrá trasladar 1,800 pasajeros. Tendrá todas las comodidades que estamos viendo en la construcción de la Línea 2, y que permitirán el desplazamiento seguro y eficiente de sus usuarios. Se estima que movilice dos millones de personas al día, con lo que se convertirá en la línea más importante de la red.
Según el MTC, hay cinco países interesados en su ejecución, que se hará bajo la modalidad de contrato de Gobierno a Gobierno (G2G).
El mes pasado el gobierno aprobó la asignación de S/ 252 millones para la contratación de la PMO (Oficina de Gestión de Proyectos). Con ese paso, que permitirá iniciar sus estudios, la obra se consolida en la programación oficial, rumbo a comenzar a ser ejecutada en un mediano plazo, probablemente coincidiendo con el momento en que la Línea 2 comience a operar en toda su extensión o en la mayor parte de ella.
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