Se puede ver el nivel subterráneo, con las numerosas columnas allí instaladas, y que, dotadas de grandes zapatas y aisladores sísmicos, sostendrán los varios pisos que tendrá el gran recinto.
A lo lejos, como yendo hacia la torre de control (que apenas se alcanza a ver y que ya está cerca de ser entregada a CORPAC para su equipamiento) se aprecia los avances concretados en el espigón central, que en la primera etapa del proyecto (a ser entregada a inicios del año 2025) tendrá alrededor de 300 metros de largo (y 40 de ancho) y unas cinco mangas de abordaje (las otras estarán en los espigones laterales).
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