El turismo receptivo se viene constituyendo en una muy importante fuente de divisas para el país. Así lo demuestran los datos del Ministerio de Comercio Exterior y Turismo (MINCETUR), según los cuales en el año 2007 ingresaron al país más de 1.8 millones de turistas extranjeros, dejando ingresos por más de US$ 2 mil millones, monto mayor en 24% al del 2006.
Y en el presente año la tendencia sigue fuerte, pues tan sólo en el primer trimestre han arribado más de 500 mil visitantes, lo que implica un aumento de más de 12% respecto de similar período del año anterior, y hace prever que se superará los 2 millones de visitantes.
Pero el turismo no sólo es importante como fuente de divisas. También lo es como elemento generador de empleo y de lucha contra la pobreza, dada su naturaleza descentralizada. Es que los turistas extranjeros no sólo visitan las históricas y monumentales Lima (reconocida en la actualidad como la capital latinoamericana de la gastronomía) y Cusco (con su formidable joya incaica Machu Picchu) .
También enrumban hacia el norte, en busca de los magníficos vestigios arqueológicos de Sipán, Chavín, Chan Chan o Kuélap, o de las hermosas playas de Máncora o Punta Sal. O hacia el oriente, en pos de la magia de la selva y del río Amazonas.
Otros lo hacen hacia el sur, con el afán de sobrevolar las mundialmente famosas Líneas de Nazca, o pasear por la señorial belleza de Arequipa, o por las riberas del hermoso lago Titicaca.
Ahora, inclusive, nuestros visitantes tienen una nueva alternativa en la antiquísima Caral, cuna de la civilización americana, a un paso de la capital.
En cada uno de ésos, y en muchos otros lugares, el turismo se hace presente y deja su aporte, que contribuye, en forma directa, a la elevación del nivel de vida de sus pobladores.
Dado el enorme potencial con que cuenta nuestro país, sólo comparable al de las grandes potencias mundiales, sorprende que los flujos de visitantes e ingresos monetarios sean inclusive mucho menores que los de países no tan dotados como el nuestro.
Turistas japoneses en Machu Picchu (Foto: David Herranz)
Actualmente, el Perú ya es uno de los países latinoamericanos con mayor gasto turístico per cápita, con un promedio de US$ 1,100. Eso se debe a que, por provenir en un alto porcentaje de Europa, Japón y Estados Unidos, nuestros turistas tienen mayor poder adquisitivo, y por ende mayor capacidad para permanecer más días y gastar montos mayores que los turistas que arriban a la mayoría de los países vecinos.
El objetivo del Mincetur es ubicar al Perú entre los diez principales países del mundo en cuanto a ingresos. Con el enorme potencial existente, y con la cada vez mayor conciencia de la población acerca de la crucial importancia de esta actividad, no parece ser una meta imposible de lograr.
Con nuestros tremendos atractivos turísticos deberiamos tener muchos mas visitantes. Hay que seguir mejorando esos datos.
ResponderEliminarMe parece bien que se opte por un turismo de elite, pues nuestro acervo es en gran parte historico y cultural.
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