Su nivel varía por efecto de la evolución de los diversos flujos del sector externo: comerciales y de servicios, inversión extranjera, remesas y otros factores que inciden en la balanza de pagos (cuyo saldo se traduce en la variación de las reservas), todos los cuales, a su vez, se ven influidos por lo que ocurre en el panorama global, por ejemplo las tensiones internacionales o el proceso electoral en Estados Unidos.
Como lo dicen estos datos, publicados por los respectivos bancos centrales, la mayoría de países de la región consignan montos mayores a los de finales del año pasado. Las han disminuido, pero no de manera dramática, Ecuador, Costa Rica y Chile.
Brasil, con US$ 363,282 millones, es el indiscutible líder regional, superando por una gran diferencia a México.
A nuestro país le siguen, a gran distancia, Colombia, Chile y Argentina (que las ha incrementado US$ 3,329 millones).
Cabe señalar, sin embargo que el dato argentino no es comparable con los demás, pues se refiere a las reservas brutas, de las cuales hay que restar los grandes pasivos a corto plazo de su banco central, una compleja situación que el equipo económico está intentando resolver. Si se considerara la cifra neta, que con dificultad está procurando ser levemente positiva, sería de las menores de esta tabla.
No hay comentarios:
Publicar un comentario