Tras un durísimo año 2020, con caídas generalizadas debido a la pandemia, el 2021 tampoco ha comenzado nada bien para las siete más grandes economías de América Latina.
Así lo demuestran los datos referenciales de enero emitidos por sus respectivos institutos de estadística o bancos centrales, que también dejan ver retrocesos sin excepción.
Sin duda, el mayor responsable de esta situación ha sido el rebrote del virus, que al haber causado grandes estragos en la salud de la población ha obligado a nuevas medidas restrictivas.
El país de menor caída ha sido Brasil, que no pudo sostener su avance de diciembre, y que probablemente luego se vea aún más afectado debido al muy preocupante avance de la enfermedad.
Le sigue el Perú, que también desmejoró tras su leve recuperación de diciembre, y que sin duda acentuará su retroceso en febrero, al haberse visto obligado a una nueva cuarentena para enfrentar una segunda ola.
En la lista sigue Argentina, con una caída que si bien no es demasiado pronunciada, no oculta el hecho de que padece graves problemas macroeconómicos y fiscales, que seguramente seguirán implicando cifras muy débiles o negativas.
Chile y Colombia también registraron significativos traspiés, mayores que los de diciembre, y Ecuador, que había avanzado bien en dicho mes del año, registró una muy fuerte caída en enero.
México, que en diciembre había atenuado su ritmo de declive, tuvo uno muy notorio en enero, y, de acuerdo a lo que informa su estimación más reciente, también lo acaba de tener en febrero.
Nota: el cuadro y el texto de este artículo fueron modificados el 30 de marzo, para incluir el recién publicado dato argentino.
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