lunes, 12 de julio de 2021

Masiva Protesta contra el Desastre Cubano

Hoy el pueblo de Cuba salió a protestar masivamente contra la satrapía comunista, que ya lleva 62 años atornillada al poder, y que, por supuesto, no tiene la menor intención de dejarlo.

En ese larguísimo tiempo, el país caribeño pasó de tener un nivel de desarrollo similar al promedio latinoamericano a tener uno de los más miserables, por efecto del desastre social, político y económico causado por la tiranía de los Castro y de su impresentable partido único.

Muestra de ello es que allí no hay ninguna de las libertades que existen en los demás, ni la menor posibilidad de desarrollo personal ni social. Lo único que abundan son las carencias y padecimientos, las letanías mentirosas del gobierno, las restricciones y la falta de perspectivas. La única forma de mejorar siendo cubano es abandonar el país, pues la tiranía anuló toda posibilidad de lograrlo internamente.

Y no es que el desastre económico se deba (como repite falsamente la propaganda de allí y de otras partes) a embargos o bloqueos. Se debe a la irracionalidad propia de la ideología comunista, que le lleva a creer que puede progresar un país en el que se mata la propiedad y la iniciativa privada (pues el Estado es dueño de todo y decide todo), y por ende no existe la posibilidad de disfrutar de lo legítimamente ganado, ni el menor incentivo para producir ni esforzarse más. Por eso las propias cunas del comunismo internacional, China y la URSS, dejaron atrás esa absurda visión y enrumbaron hacia sus modelos de hoy.

Ojalá las marchas y protestas se acrecienten y tengan éxito, para lograr debilitar a ese nefasto régimen y acercarlo a su fin (eso también serviría para que pongan las barbas en remojo otros sátrapas de la región, como Maduro y Ortega, quienes imitando el aberrante modelo cubano también aspiran a atornillarse vitaliciamente, mientras destrozan a sus países).

Obviamente, tal cosa no será nada fácil, pues se trata de uno de los regímenes más brutales del mundo, que ya ejerció una terrible violencia contra muchos opositores en el pasado, y sin duda volverá a perpetrarla si la situación se le descontrola.

Esto último ya lo dejó claro el sátrapa actual, Díaz Canel, quien con un discurso tan cínico como los de las últimas seis décadas acaba de lanzar una inquietante amenaza, induciendo a sus cómplices  del gobierno y de su fanática militancia a dar "respuesta revolucionaria" a quienes se atrevan a exigir las libertades y demás cosas que en la mayor parte del resto del mundo son cosa corriente. Para empezar, ya comenzó con la censura, restringiendo el internet a los pocos que lo tienen, para impedir que la gente se informe acerca de la situación de convulsión.

Además, ya detuvo a cientos de manifestantes, a quienes seguramente les aplicará las golpizas y torturas que son usuales allí, donde la premisa básica es abortar lo más rápido posible, con los métodos que sean necesarios, todo intento del pueblo en pro de la democracia.

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