Para permitir que sus casi diez millones de habitantes disfrutaran plenamente de su extenso y bello mar, Lima requería que sus aguas quedaran libres de la contaminación que padecían.
A tal efecto, el gobierno decidió desarrollar, mediante concesiones al sector privado, dos grandes proyectos, consistentes en la construcción de sendas plantas de tratamiento de aguas residuales (PTAR).
La más grande, la PTAR Taboada, fue concesionada a la empresa española ACS Servicios, Comunicaciones y Energía. Situada cinco kilómetros al norte del puerto del Callao, demandó una inversión de más de US$ 215 millones. Fue inaugurada el año 2014, y desde entonces procesa hasta 20.3 metros cúbicos por segundo (mcps), encargándose del 70% de las aguas servidas de la ciudad.
La segunda, algo más pequeña, es la de La Chira, entregada en concesión al consorcio homónimo, integrado por las empresas Acciona Agua de España y Graña y Montero del Perú.
Ubicada en el distrito de Chorrillos (al sur de Lima) y capaz de purificar 11.3 mcps, requirió una inversión de 360 millones de soles (US$ 110 millones). Ayer fue inaugurada por el presidente Humala.
Con ambas, y con las pequeñas plantas adicionales de su empresa de agua y saneamiento (SEDAPAL), Lima ya trata adecuadamente el 100% de las aguas residuales que produce. Eso significa que el próximo verano las playas de la Costa Verde y de todo el litoral capitalino estarán expeditas para brindar a los limeños un amplio espacio natural dotado no sólo de aire puro y gran belleza paisajística, sino también de un mar agradable y limpio.
1ra Foto: M&M Travel Agency
2da Foto: Google Earth
Render: SEDAPAL
Último Grupo de Fotos: Ministerio de Vivienda
Me parece bien, pero afirmar que el mar de lima estara limpio es un poco triunfalista.Las aguas immundas del rio Rimac, no desembocan en el mar
ResponderEliminarMUY CIERTO EL COMENTARIO ANTERIOR LA GENTE ARROJA COCHINADA Y MEDIA A ESE RIO
ResponderEliminar