Poco a poco, los aeropuertos nacionales mejoran su infraestructura y equipamiento, y con ello la calidad de sus servicios.
El de Lima, radicalmente modernizado tras su concesión hace catorce años, es prueba de ello. Y muy pronto ejecutará, por varios cientos de millones de dólares, obras mucho mayores, que incluirán una terminal de primer nivel y una segunda pista de aterrizaje.
El de Cusco instaló el año pasado luces para aterrizajes nocturnos, que ahora le permiten operar hasta cerca de las ocho de la noche. Si allí no se hace nuevas obras de gran envergadura es porque en unos siete años será reemplazado por el gran aeropuerto internacional de Chinchero, destinado a ser el segundo más importante del país.
El de Arequipa, por su parte, fue ampliado y modernizado hace un año, gracias a una inversión de US$ 10 millones de su operador privado, que incluyó, entre otras cosas, la construcción de un segundo piso para su sala de embarque y la instalación de dos modernas mangas, así como de escaleras eléctricas, ascensores y equipos de rayos X. Además, se adquirió vehículos especiales contra incendios, y se prevé el reasfaltado de la pista, y luego la construcción de una nueva terminal, cuatro veces más grande que la actual.
Últimamente ha sido el turno de los aeropuertos de Tacna y Ayacucho, ambos concesionados a la empresa Aeropuertos Andinos del Perú (AAP). En el primero (visible en los dos bloques de fotos que siguen) se ha rehabilitado la pista de aterrizaje y remodelado y ampliado en 40% el área del terminal de pasajeros.
Además, se ha instalado nuevos sistemas de comunicación y seguridad (como circuito cerrado de TV y máquinas de rayos X), cableado estructurado, fajas y otros equipos para movilizar equipajes y carga, y adquirido vehículos portaequipajes y contra incendios.
En el de Ayacucho (observable en el siguiente bloque de imágenes) se ha reasfaltado su pista de aterrizaje, lo que permitirá a éste, que anteriormente sólo podía recibir aviones como el Fokker 28, acoger naves más grandes, como algunos modelos de Airbus o el presidencial Boeing 737, observable en una de las fotos siguientes. Y está prevista una nueva franja en la referida pista.
Además, allí se ha efectuado la remodelación de los dos pisos de su terminal de pasajeros y sala de embarques, e instalado equipos de rayos X, circuito cerrado de TV y otros elementos de seguridad.
La inversión fue efectuada mayoritariamente por AAP, con participación del Estado. La del aeropuerto de Tacna fue de 55 millones de soles (unos US$ 19 millones), y la de Ayacucho de 33 (US$ 11 millones).
Eso no es todo lo que se viene haciendo. Pronto se reasfaltará la larguísima pista de más de 4 mil metros del aeropuerto de Juliaca. Y ya se hallan muy avanzadas las obras en el sureño aeropuerto de Pisco, destinado a convertirse (gracias a una inversión de más de US$ 50 millones de su operador privado Aeropuertos del Perú) en una alternativa de bajo costo para el Jorge Chávez. La misma concesionaria tiene grandes planes para Iquitos (uno de nuestros aeropuertos con mayor proyección internacional) y Chiclayo.
Fotos: MTC
No hay comentarios:
Publicar un comentario