La obra, que demandó una inversión de 48 millones de soles (aproximadamente US$ 15 millones), implicó la construcción de un viaducto elevado de 425 metros de largo, que, siguiendo el trazo de la avenida América Sur, permite el paso de ésta sobre las avenidas La Marina y Moche, eludiendo la congestión vehicular que se producía allí, en el denominado óvalo Grau. En dicho lugar, el viaducto (capaz de resistir hasta 120 toneladas) se bifurca en dos viaductos paralelos, que bordean desde lo alto (ver foto) la vistosa fuente de sesenta metros de largo que, con una tecnología de luces computarizadas, se ha construido allí.
La flamante infraestructura vial se suma, en lo que respecta a elementos facilitadores del tránsito en la ciudad, al bypass Mansiche (ver video que sigue), construido mediante el interesantísimo sistema de obras por impuestos, e inaugurado a fines del año 2013.
Un buen paso de la bella urbe norteña, que en poco más de un año ha pasado de no tener ninguno a tener dos de estos importantísimos elementos viales, pero que debe redoblar sus esfuerzos para contar con muchos más, para estar acorde con su tamaño, su población y el gran número de vehículos que transitan por sus calles y avenidas.
Foto: Andina
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