El sistema de corredores viales complementarios puesto en marcha en Lima por la anterior alcaldesa Villarán, felizmente ha sido mantenido y está siendo potenciado por el actual alcalde Castañeda, lo que está contribuyendo a poner orden en el caótico transporte capitalino.
El primero puesto en operación, en la gestión anterior, fue el de la ruta Tacna-Garcilaso-Arequipa, conformado por buses azules, y ahora también por buses grises con franjas azules.
Éste, por su mayor tiempo de vigencia y por estar más consolidado, es el que tiene más líneas, nada menos que cuatro: 301, 302, 303 y 306. El recorrido de la primera (301) es el siguiente:
El de la segunda (302) es éste:
El de la tercera ( 303) es éste:
Y el de la cuarta (306), éste:
El segundo corredor, puesto en marcha durante la actual gestión del alcalde Castañeda, es el de la ruta Javier Prado-La Marina-Faucett, en el que circulan buses grises con franjas rojas, de las líneas 201 y 209.
La primera de ellas (201) hace el siguiente recorrido:
Y la segunda (209), éste:
Y hace pocos días se acaba de poner en operación, todavía en fase de prueba, el tercer corredor, en la ruta Rímac-San Juan de Lurigancho.
Por allí transitan buses grises con franjas moradas, de la línea 412.
Teniendo en cuenta la enorme población de ese distrito, no cabe duda de que pronto se pondrá en operación nuevas líneas, que permitan atender satisfactoriamente la fortísima demanda que allí se observa.
Como lo señala el gráfico que abre este artículo, serán cinco los corredores que habrá en la ciudad, restando los de color amarillo y verde, cuyos buses transitarán por las carreteras Panamericana y Central, respectivamente. Con los cinco en funcionamiento, conformando un verdadero sistema integrado de transporte, la ciudad habrá dado un significativo paso en su objetivo de mejorar uno de los aspectos en que se hallaba más atrasada.
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