El Legado Socio-Educativo será el derivado de la participación masiva de peruanos, unos en la organización (por ejemplo los miles de voluntarios), otros en las competencias mismas y muchos otros alentando. Eso ayudará a crear un ambiente de acercamiento con el deporte, facilitando la difusión de sus virtudes y ayudando a reducir problemas tales como el abuso de sustancias, el pandillaje y el abandono escolar. Otro efecto positivo en este aspecto será que ayudará a superar ideas erróneas sobre las personas con discapacidad, empatizando con los deportistas con estas características.
El Legado Económico provendrá del potenciamiento que se hará de rubros tan importantes como el turismo, la hotelería y la gastronomía. Con los juegos, Lima tendrá una formidable e irrepetible exposición, no sólo ante los visitantes de las 41 delegaciones participantes y sus fans, sino ante muchos millones de televidentes. Gracias a esto resultarán impulsadas las oportunidades de negocio en deporte y recreación, el patrocinio de eventos, el auspicio por parte de entidades deportivas y la realización de eventos deportivos en los ámbitos regional, nacional e internacional. Asimismo, se propiciará el involucramiento de entidades privadas en el mantenimiento de instalaciones deportivas y servicios urbanos. No hay que olvidar, además, que la cuantiosa inversión llevada a cabo para construir la notable infraestructura que hoy tenemos a la vista ayudó a dinamizar el sector construcción y todos los que se articulan con él, generando miles de puestos de trabajo.
El Legado de Desarrollo Urbano, por su parte, será el que se está propiciando a partir del afán del gobierno, la ciudad y sus diferentes distritos para mejorar durante el evento (y causar buena impresión) diversos aspectos fundamentales, como las condiciones del tránsito, la seguridad, la limpieza pública, la inclusión y la accesibilidad. Si se logra mantener ese afán, procurando, por ejemplo, que no se detenga la construcción de rampas y otras facilidades para el acceso de las personas de movilidad reducida, se habrá ratificado el legado de los juegos en este aspecto.
Se que no será así pero, sería ideal que el IPD apoye presupuestariamente a cada Federación con convenios, y que cada una de estas se quede con cada Sede respectiva para su deporte. Así tendríamos que cada Federación se volvería más competitiva, en todo caso, eso se tendría que hacer mediante algún convenio macro.
ResponderEliminarSegún tengo entendido eso es lo que se esta haciendo. Cada entrega de instalación es a su respectiva federación relacionada. Al menos en recintos de uso de un solo deporte
EliminarTienes razon, queda el riesgo que todo se termine oxidando, como suele pasar en los paises donde se hacen eventos, despues nadie usa los locales, o si lo usan los dejan que se caigan a pedazos.
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