Reforma Política y Argumentos de Real Peso

El gobierno comenzó a difundir hoy este importante mensaje, referido a la reforma que está planteando para mejorar la institucionalidad y corregir la manera en que se hace política en nuestro país.


La reforma es urgente porque esa precaria institucionalidad y ese inadecuado procedimiento constituyen un enorme caldo de cultivo para la corrupción, convertida hoy en el más grave problema nacional.

Debido a ello es que surgen políticos cuyo interés no es servir al país, sino satisfacer mezquinas ambiciones personales, en procura de las cuales no dudan en afectar gravemente las arcas públicas. Eso lo hacen a través de partidos políticos sin ideales ni identidad y funcionarios (como congresistas y jueces) sin principios ni valores, y por ende fácilmente manipulables mediante sobornos y otras formas de presión.

Por ello se propugna cambios legales y constitucionales, que destierren esas prácticas corruptas y modifiquen nuestra forma de hacer política.

En tal sentido, se plantea que ya no puedan candidatear al Congreso quienes tengan sentencias por delitos dolosos y que ya no existan congresistas protegidos indebidamente por la figura de la inmunidad. Asimismo, que las elecciones en los partidos políticos sean abiertas (con participación de la ciudadanía y la supervisión de los organismos electorales oficiales) y que estos se mantengan vigentes y auténticos (eliminando la inscripción de aquellos que no participen en los procesos electorales y se limiten a actuar como vientres de alquiler del oportunista que les ofrezca más dinero). Además, se plantea eliminar el voto preferencial, para que la ciudadanía vote por agrupaciones e ideales políticos, y no por el candidato que hace más publicidad (en muchos casos con dinero de dudosa procedencia).

Como vemos, se trata de reformas realmente importantes, que implican un enorme cambio frente al actual modo de hacer política. Así las cosas, se comprende el ímpetu que el gobierno está poniendo para su pronta aprobación en el Congreso, para que puedan entrar en vigencia en las elecciones generales del año 2021, las del bicentenario.