Existen diversas herramientas para medirlo, siendo una de las más empleadas el EMBIG (Emerging Market Bond Index Global o Índice Global de Bonos de Mercados Emergentes) o EMBI+. Este toma en cuenta la diferencia de rendimiento entre los bonos en dólares emitidos por el país en evaluación y los del Tesoro de Estados Unidos (considerados los más seguros del mundo). A más diferencia, mayor nivel de riesgo.
Al cierre de abril el promedio regional fue de 410 puntos básicos (pbs, 4.10 puntos porcentuales), significativamente mayor que el de marzo (329). Algunos países mejoraron en la materia, pero otros empeoraron, especialmente Bolivia, que ya se acerca a los 2 mil puntos.
Las tres mayores economías: Brasil, México y Argentina, registran niveles de 202, 309 y 1,215 pbs, respectivamente, con el país austral reduciéndolo notoriamente mes tras mes, por la confianza que inspira su nuevo gobierno, que viene aplicando un radical plan de ajuste y liberalización. El país más riesgoso es la chavista Venezuela, con un sideral nivel de 14,799, menor que los de meses anteriores, pero que sigue reflejando sus enormes debilidades y su incierta perspectiva.
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