En dicho mes, la demanda externa contribuyó significativamente, como lo revela el hecho de que las exportaciones crecieron 37.9% en términos reales (26.5% las tradicionales y 67.2% las no tradicionales).
Los sectores de mayor avance fueron Alojamiento y Restaurantes, con un espectacular 480.47%, Construcción (257.04%), Comercio (104.06%) y Pesca (102.40%).
También crecieron considerablemente las importantísimas Manufactura y Minería e Hidrocarburos, así como Transportes, Almacenamiento, Correos y Mensajería, uno de los más afectados por la crisis del 2020.
Solo retrocedió el sector Agropecuario.
Así las cosas, los que más vienen contribuyendo a esta notable recuperación son Manufactura (con 4.16 de los 19.69 puntos de avance del PBI), Construcción (3.92%) y Comercio (3.03%).
El único que viene restando puntos es el Agropecuario (0.17).La excelente recuperación que viene ocurriendo se refleja nítidamente en el último gráfico, donde las variaciones terriblemente negativas han dado paso a otras enormemente positivas. Todo ello lleva a prever que nuestra economía, de la mano de sus sólidos fundamentos, que de ninguna manera deben ser alterados, no solo será la primera o la segunda que más rebotará este año en América Latina, sino también una de las que más rápido dejarán atrás el nefasto efecto de la pandemia. Salvo, claro, que el gobierno entrante cometa la monumental insensatez de ensombrecer con decisiones absurdas esa brillante perspectiva.
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