Nada mejor para ello que presentar algunos de los cientos de vídeos que los desdichados cubanos emiten desde allí, relatando en detalle, sin intermediarios y con pleno conocimiento de los hechos, la catástrofe política, económica y social que la "revolución" produjo en su tierra, hoy convertida en un infierno donde no hay libertades y todo escasea, y lo único que abunda es la represión, la miseria y la desesperanza.
Y como a la brutal tiranía causante de esa enorme destrucción y ese inmenso padecimiento 64 malhadados años le parecen pocos, aspira a seguir atornillada al poder muchos más, o por qué no eternamente.
Por eso miles de cubanos ya no quieren saber nada de su país y huyen al que puedan, ya no solo Estados Unidos, como había ocurrido siempre, sino cualquier otro, pues cualquier opción es mejor que la propia.
El Perú está siendo testigo de eso, pues cada vez son más los cubanos que lo eligen como destino, afirmando que pese a sus problemas es un lugar mil veces preferible al suyo para vivir y abrirse camino.
No hay nada que celebrar en Cuba, y sí infinidad de cosas que lamentar. Por culpa del cataclismo comunista que le destrozó toda posibilidad de progreso, la isla, además de una gran cárcel, es hoy uno de los lugares más miserables de América. Probablemente ya solo en Haití se viva peor.
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