El fenómeno del Niño Costero, ocurrido en los primeros meses del año, causó graves daños en la infraestructura de gran parte del país.
Ello aconteció por efecto de las intensas lluvias, que provocaron huaicos (aluviones) y desbordes de río, los mismos que inundaron campos de cultivo, ciudades y grandes extensiones de terreno, dañando carreteras, canales de riego, mobiliario urbano y viviendas, entre otros importantes elementos del stock productivo y del patrimonio de la población.
Por ello, uno de los principales objetivos establecidos por el gobierno para lo que resta del presente año y el siguiente ha sido la labor de reconstrucción. Liderando este proceso, que demandaría una inversión superior a US$ 10 mil millones, se halla la denominada Autoridad para la Reconstrucción con Cambios, que tras haber evaluado la situación y planteado las recomendaciones pertinentes, ya viene ingresando en la fase de ejecución propiamente dicha de los trabajos.
El propósito del gobierno y de dicha entidad, plasmado en una legislación que así lo estipula, es que la reconstrucción se lleve a cabo no sólo con el criterio de volver a poner en pie lo que quedó destruido, sino con un radical cambio de mentalidad respecto de lo hecho previamente, corrigiendo los errores de diseño, ubicación, materiales empleados, etc, que permitieron que la destrucción fuera tan grave, e impidiendo que la informalidad vuelva a instalarse con prácticas constructivas y asentamientos precarios que luego derivan en lamentables pérdidas humanas y materiales.
La idea es hacer una reconstrucción de calidad, que ponga a dicha infraestructura mucho más a salvo de las eventualidades que sin duda se seguirán presentando, ahorrándole al Estado enormes gastos que pueden ser evitados con tan sólo una mejor seriedad y planificación y con adecuadas medidas de prevención.
Las imágenes aquí presentadas se refieren a algunas de esas obras que se viene ejecutando en el norte del país. Es saludable que se esté avanzando, pero lo será mucho más que no se deje de lado en ningún momento el fundamental precepto de hacerlo con verdadera calidad.
Fotos: MTC
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