PBI de Febrero: con Retroceso, pero No Grave

Tal como se preveía, debido a la cuarentena que hubo que adoptar para hacer frente a la segunda ola de la pandemia, el PBI de febrero retrocedió frente al de similar mes del año pasado.

Fue un paso atrás de -4.18%, que llevó la cifra del primer bimestre a -2.57%, y la de los últimos doce meses a -11.97%. Así lo acaba de dar a conocer, mediante su más reciente Informe Técnico, el INEI.

Los sectores de mayor crecimiento en el segundo mes del año fueron Financiero y Seguros, Construcción, Pesca y Telecomunicaciones y Otros Servicios de Información.

Los de mayor caída, en cambio, fueron los dos que más vienen sufriendo con la pandemia: Alojamiento y Restaurantes y Transporte, Almacenamiento, Correo y Mensajería. Igualmente, decrecieron de manera significativa Servicios Prestados a Empresas y los muy importantes sectores de Minería e Hidrocarburos y Comercio.

La Manufactura, el sector de mayor ponderación, solo cayó levemente, gracias, entre otras cosas, al avance de la Pesca, que provee de insumo a sus importantes industrias productoras de harina y aceite.

Así las cosas, los sectores que más vienen frenando el avance productivo en los dos primeros meses son Transporte, Almacenamiento, Correo y Mensajería (con 1.44 de los 2.57 puntos que ha retrocedido el PBI), Alojamiento y Restaurantes (1.33) y Otros Servicios (0.86).

Contrariamente, los que más vienen contribuyendo son Financiero y Seguros (1.08), Construcción (0.78), Telecomunicaciones y Otros Servicios de Información (0.33) y Manufactura (0.33).

Como se observa en el último gráfico, la economía, luego de haberse recuperado rápidamente desde mayo hasta el final del año pasado, tuvo un traspié en enero y febrero de este año, pero no por fallas propias, sino debido al arribo al país de la segunda ola de la pandemia, que obligó a endurecer las restricciones en febrero. A eso se sumó, en ese último mes, el factor estadístico de que tuvo un día laborable menos que su par del año pasado, que fue bisiesto.

Pero ahora se reemprenderá el camino de la recuperación, y muy fuerte, previéndose que tanto en marzo como en abril el PBI registre tasas de expansión de dos dígitos. Un adelanto de eso lo acaba de proporcionar la producción de electricidad de la primera quincena de abril, que ha crecido casi 40% frente a igual período del año pasado. Por esa y otras razones, como la tendencia alcista que muestran los precios de nuestras exportaciones, el MEF y el BCR mantienen estimaciones de crecimiento para el año que pondrían a nuestra economía muy cerca de recuperar casi todo lo perdido el año pasado. Salvo que el nuevo gobierno que se instale en julio tome erróneas medidas que ensombrezcan esa alentadora perspectiva.