Si bien el flamante canciller había hecho precisiones acerca de su ambigua y por ende desafortunada declaración inicial sobre el tema venezolano, se requería una aclaración en un nivel superior.
Es que sus opiniones habían causado un gran desconcierto e inclusive mucha molestia, habida cuenta de que el Perú, con el ex canciller Gonzáles Olaechea, se había destacado en la región como uno de los principales críticos del fraudulento intento del dictador Maduro, y uno de los más notorios defensores del presidente electo Edmundo Gonzáles Urrutia y la gran lideresa María Corina Machado.
Felizmente, la presidenta Boluarte ratificó hoy que la posición peruana no ha cambiado, y continuará en la misma línea. Dijo que el Perú no va a ser parte de un fraude electoral ni va a apoyar a ningún gobierno dictatorial, y mantiene su solidaridad con el pueblo venezolano.
Esa es la posición correcta, que de ninguna manera y por ningún motivo debe ser alterada, y más bien debe ser sostenida cada vez con mayor intensidad, para contribuir en todo lo que se pueda al debilitamiento del sátrapa que pretende aplastar la voluntad popular.
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