El complejo de ingreso, de 27 hectáreas, permitirá planificar la entrada y salida de los cientos de camiones que interactuarán con el puerto.
El túnel, de 1.8 kilómetros de largo, pasará debajo de la ciudad, uniendo el complejo de ingreso y la zona operativa portuaria, y contará con un viaducto de tres carriles por el que ingresarán y saldrán los camiones. Por allí también pasarán dos fajas transportadoras (para graneles sólidos) y tuberías multiproductos (para graneles líquidos).
Por su parte, el muelle de espigón, de 275 metros de largo, permitirá (con la participación de grandes silos, grúas móviles, fajas transportadoras, tolvas y otros equipos) cargar y descargar graneles sólidos y líquidos, y también atender cruceros y desembarcar vehículos.
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