Así ocurrió con la pandemia, que al generar una gran recesión los obligó a reducir muchísimo sus tasas de interés de referencia, para socorrer sus economías desde el ámbito monetario, facilitándoles liquidez.
Y así también está ocurriendo ahora, en que la abundancia de liquidez y la considerable reducción de la oferta de importantes productos como consecuencia de la guerra ruso-ucraniana han generado una elevada inflación, que los está obligando a endurecer su accionar monetario, elevando sin excepción y de forma muy pronunciada su tasa.
No hay diferencias. Ya sean de países muy desarrollados o de nuestra región (como el Perú), los bancos centrales deben actuar de esa forma, la recomendada por la teoría económica y la evidencia empírica.
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