Siglo XXI: en Estabilidad el Sol le Ganó al Dólar

Hace un par de días mostramos aquí que desde inicios del presente siglo el tipo de cambio Sol/Dólar solo había aumentado 3.9%.

Tipo de cambio aproximado a inicios de siglo: pronto podría repetirse la figura.

Este había pasado de 3.523 soles por dólar el 1 de enero del 2001 a 3.659 el 12 de mayo del presente año.

Pero en realidad nuestra moneda ha exhibido un desempeño mejor del que ese dato suelto expresa. Es que si se toma en cuanta el promedio de todo el período, considerando cada una de las cotizaciones diarias habidas en esas más de dos décadas, el sol sale ganando.

En efecto, los datos de la SBS nos dicen que en ese muy extenso tramo de tiempo el tipo de cambio promedió los 3.238 soles por dólar. Es decir, un valor menor que el inicial. Significa que en promedio el sol estuvo revaluado 8.1% frente al dólar.

Eso también se comprueba en el gráfico publicado en el referido artículo, y que aquí repetimos. Allí se aprecia que la inmensa mayoría del tiempo el tipo de cambio había permanecido debajo del valor inicial (que sigue el trazo aproximado de la línea roja que hemos añadido). Inclusive había llegado a un mínimo de 2.541 a inicios del año 2013.

Solo el inmenso ruido político que generamos después, y que nos llevó a una enorme inestabilidad en el tema y a tener seis presidentes en un quinquenio, y luego la pandemia (con sus efectos propios y luego con los desequilibrios que generó), la incertidumbre que provocó el desastroso gobierno de Castillo, la invasión de Rusia a Ucrania (con nueva tensión, inquietud e inflación global) y un amago de gran crisis bancaria en EEUU pudieron debilitar nuestra moneda, que por eso perdió terreno.

Pero aún con todos esos factores negativos (en su gran mayoría exógenos), hoy es apenas 3.9% más débil que el dólar. Y con la tendencia a fortalecerse que ha venido mostrando desde la justificada vacancia del nefasto y golpista Castillo, la situación pinta bien, a tal punto que no sería raro que muy pronto regresemos exactamente al punto de partida, con nuestro sol sin haber perdido ni un ápice de valor frente a la moneda más célebre, confiable y reputada del mundo.