Desde la última vez que publicamos nuestro cuadro, hace un mes, dos de las siete mayores economías de América Latina han disminuido las suyas. Hablamos de Colombia, que a inicios de septiembre la redujo de 2.25% a 2.00%, y de México, que hace tres días la llevó de 5.00% a 4.50%, su nivel más bajo desde el año 2016.
Los demás países no la han modificado. El dolarizado Ecuador continúa con la menor de todas, acorde con su condición de país menos inflacionario. El Perú y Chile, por su parte, ya registran tasas mínimas, que resultan negativas en términos reales, y además expansivas en lo que atañe a su influencia en la actividad económica.
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