Teniendo en cuenta ese y otros hechos relevantes, se ha presentado una iniciativa privada que con una inversión estimada de US$ 180 millones prevé modernizarlo y mejorar sus capacidades y prestaciones. Es una que lo pondrá en condiciones de movilizar productos de exportación como harina de pescado, minerales y producción agroindustrial.
Ojalá el proceso de concesión a cargo de la agencia Proinversión marche de acuerdo a lo esperado. De ser así Chimbote se convertiría en el noveno puerto concesionado, dándose por descontada una mejora en su infraestructura y equipamiento tan notables como los que se vio en los ocho anteriores que accedieron al capital privado.
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