Y eso se explica por la masiva inversión privada desembolsada, en el marco de procesos de concesiones que, como muestran las evidencias, han resultado tremendamente exitosos.
No de otra forma se explica la radical mejora que han tenido todos los que han pasado por ellos. Mejoras enormes en sus capacidades, equipamiento y prestaciones, todas ellas infinitamente superiores a las de su lamentable etapa estatal.
Este video de Proinversión es un buen recordatorio al respecto. Allí se aprecia las cuantiosas cifras invertidas en el Muelle Sur del Callao, Paita, Yurimaguas-Nueva Reforma, el terminal de concentrados del Callao, el Muelle Norte del Callao, Pisco y Salaverry.
Y el proceso continúa, con el importante proyecto del puerto de San Juan de Marcona, que está en preparación. Y se renueva con la puesta en marcha de nuevas etapas previstas en contratos ya firmados, como la ampliación que está efectuando el Muelle Norte del Callao y que lo conducirá a tener tres amarraderos de gran tamaño, o la que en su momento ejecutará Salaverry para tener un gran muelle para contenedores, o la adquisición de una o más grúas pórtico en Pisco.
Ese éxito es el que está induciendo a extender el esquema a puertos como Ilo y Chimbote, que en su momento no estuvieron incluidos, y que ahora van camino a estarlo y a gozar de sus beneficios.
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