Aunque no con la velocidad inicialmente prevista, las redes de gas natural se están extendiendo a cada vez más ciudades de nuestro país.
Así lo señala el MINEM, según el cual en la actualidad ya hay más de 1.2 millones de familias en el Perú que se benefician al recibir en sus hogares, mediante red pública, este fundamental hidrocarburo.
De esta manera, el gran yacimiento de Camisea está aportando magníficamente al desarrollo de una gran parte del país, no solo abasteciendo a las grandes centrales térmicas que generan un porcentaje muy importante de la oferta eléctrica nacional, sino proveyendo a la población un combustible barato, limpio y seguro, para usos residencial, comercial, vehicular e industrial.
Actualmente ya tienen red de gas amplias zonas de las ciudades de Lima, Callao, Cañete, Ica, Chincha, Pisco, Nazca, San Juan de Marcona, Chiclayo, Lambayeque, Chimbote, Huaraz, Trujillo, Pacasmayo, Cajamarca, Arequipa, Ilo, Moquegua y Tacna; y en corto tiempo también la tendrá Piura.
Ojalá se siga extendiendo la lista, para que abarque a otras ciudades importantes aún no beneficiadas (entre ellas Huancayo, Huancavelica, Ayacucho y Abancay). Y que pronto se pueda destrabar y sacar adelante el anhelado gasoducto surperuano, con el objeto de que las numerosas ciudades de los departamentos del Cusco (sede de Camisea) y de Puno también puedan acceder con fluidez a este importantísimo insumo.
es un chiste que el gas sea de cusco u esta no disponga de el
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