En efecto, en la capital los precios al consumidor se redujeron 0.29%, y en el territorio nacional lo hicieron en 0.20%, llevando las tasas acumuladas en lo que va del año a 1.24% y 1.11%, respectivamente.
De esa manera, en los últimos doce meses la inflación de Lima Metropolitana apenas llega a 1.11% y la del país a 1.16%, una tasa que se consolida entre las más bajas de América Latina y que ayuda a preservar la capacidad adquisitiva de la población, favorece el valor del sol y genera otros múltiples beneficios en nuestra economía.